NOTA: Del lado derecho esta una encuesta, POR FAVOR AYUDANOS A LLEVARLA A CABO.....DEBERA HABER UNA REAPERTURA DEL MUSEO Y A QUIEN PEDIRLA?
Los
fríos y obscuros días típicos de otoño, anuncian esta antigua tradición que
permanece viva en nuestros días, y a pesar de las costumbres del vecino país
del norte, la combinación del Halloween y el día de muertos ha logrado
amalgamarse y hacer de la muerte una fiesta.
Muy
temprano por la mañana, nos dimos a la tarea de buscar uno de los elementos
principales de los altares de Ofrenda a nuestros difuntos, pues este año, la flor
de Cempazúchitl (flor de
veinte pétalos),no fue sembrada en nuestra población, por lo que la fuimos a
conseguirla en los campos de Atlacholoaya en el municipio de Xochitepec.
Se inició la colocación del altar con hojas de plátano, como mantel, ya que
así dicta la tradición en Tetelpa, pero enmarcada con una cabecera decorada con
flores y frutas, a la usanza de las ofrendas del estado de Michoacán.
El repique de las campanas de la Iglesia, nos estaba marcando las 12 del día
y a la vez daba la bienvenida a los difuntos adultos que regresan del más allá
para deleitarse con los alimentos expuestos para ellos.
Es importante que primero se coloque el agua para saciar la sed del viaje,
la luz representada por las veladoras y la sal.
A lo largo de la tarde se van
colocando el pan, la fruta, la conserva de tejocote, arroz con leche y por ultimo
se sirven los platos fuertes como lo es el mole verde acompañado de tamales
nejos y los tamales de carne con chile verde y rojo.
Es importante mantener el sahumerio con incienso o copal, ya que este
ayudará a purificar el ambiente.
Entrada la noche, comenzaron a llegar los niños que harían la algarabía en
las calles, disfrazados de catrinas, brujas, vampiros y todo tipo de seres de
ultratumba y que al canto unísono de “la calavera
tiene hambre, no hay un pedazo de pan por ahí, no se lo acaben todo, déjenos la
mitad” agradecían los dulces, fruta o pan que se le regalaran.
Al final las mamás que acompañaban a sus hijos daban las gracias por esta atención, no faltando una que quería salir en la foto con la catrina!
COLABORACION DE:
Juan Manuel Calvario Anonales.
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